En el mundo de la arquitectura industrial, la seguridad es un pilar tan crítico como el diseño mismo. Hoy exploraremos cómo integrarla para proteger a las personas y maximizar la eficiencia operativa, desglosando algunos de los fundamentos de la seguridad desde el diseño, un enfoque que abarca mucho más que el cumplimiento riguroso de normas técnicas, para que cada proyecto no solo sea intrínsecamente seguro, sino que también aporte activamente al bienestar de los usuarios.
¿Qué es la seguridad industrial?
La seguridad industrial se refiere a la gestión de todos los aspectos relacionados con la seguridad en los ambientes de trabajo industriales. Este concepto abarca una amplia gama de disciplinas y prácticas diseñadas para minimizar los riesgos y algunos de sus componentes clave incluyen:
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Ergonomía: Se centra en diseñar puestos de trabajo, herramientas y entornos que se adapten a las capacidades físicas de los empleados, mejorando su comodidad y reduciendo el riesgo de lesiones.
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Equipos de Protección Personal (EPP): Se refiere al uso obligatorio de indumentaria y equipos diseñados para proteger a los trabajadores de riesgos específicos.
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Cumplimiento normativo: Asegura que todas las operaciones y prácticas cumplan con las leyes y regulaciones de seguridad locales e internacionales.
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Análisis de riesgos y protocolos de prevención: Evaluación sistemática de los posibles peligros en el lugar de trabajo para implementar medidas preventivas adecuadas, enfocándose no solo en la protección contra accidentes evidentes, sino también en situaciones recurrentes que puedan deteriorar la salud a largo plazo de los trabajadores.
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Seguridad desde el diseño arquitectónico: Se asegura que la arquitectura misma contribuya a prevenir accidentes y facilitar medidas de emergencia.
Gestión integral de riesgos en el diseño arquitectónico industrial
A medida que el sector de la construcción evoluciona, la incorporación de la seguridad desde el diseño se ha convertido en un enfoque fundamental para la creación de espacios de trabajo seguros y eficientes. Identificar y mitigar riesgos desde las primeras etapas de diseño no solo nos ayuda a garantizar el cumplimiento normativo, también a evitar accidentes, pero, sobre todo, a mejorar el bienestar de los ocupantes.
Adoptar la filosofía de "seguridad desde el diseño" implica priorizar la funcionalidad y la seguridad sobre la estética y tomar en cuenta aspectos tan diversos como la ergonomía, la planificación de accesos y rutas de emergencia, la optimización de procesos, la iluminación natural y artificial, el uso eficiente del espacio, sistemas de prevención de incendios, etc.
Los accidentes laborales y/ o industriales no solo tienen un costo humano significativo que se traduce en pérdidas de calidad de vida y de la vida misma, sino también un impacto económico considerable para las compañías. Por ello, invertir en diseño arquitectónico que priorice la seguridad es fundamental para reducir estos riesgos y sus costos asociados.
¿Cómo se optimiza la seguridad industrial desde el diseño arquitectónico?
La "seguridad desde el diseño" es un enfoque que se integra completamente en la ingeniería y arquitectura, asegurando que cada fase de un proyecto contemple medidas de seguridad efectivas y sostenibles. Este enfoque se fundamenta en cuatro pilares principales:
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Seguridad por conocimiento: Utiliza la información y experiencia previa para prevenir riesgos potenciales desde la etapa de diseño.
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Seguridad por exigencias: Se refiere a cumplir con todas las normativas y estándares de seguridad relevantes para el proyecto.
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Seguridad por tecnología: Implementa tecnologías avanzadas para mejorar la seguridad de las instalaciones y procesos.
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Seguridad por procedimiento: Desarrolla y aplica procedimientos que aseguren la operación segura de las instalaciones y minimicen los riesgos durante el uso del edificio o instalación.
Al definir infraestructuras, espacios y sistemas, es necesario realizar un análisis de riesgos que considere la actividad, el emplazamiento y los requerimientos del cliente. Este análisis debe incluir la seguridad en el diseño de procesos y usos para garantizar no solo la funcionalidad, también la protección integral.
Además de asegurar que la estructura del edificio pueda resistir condiciones adversas -como sismos y tormentas-, los primeros planos arquitectónicos ya deben considerar cuestiones como la iluminación y ventilación adecuadas, las salidas de emergencia y las rutas de evacuación, la temperatura ideal de las distintas áreas, la ubicación de las instalaciones contra incendios, el sistema de detección de humos y la visibilidad de las señalizaciones, así como el acomodo óptimo de los sistemas de electricidad, drenaje y ventilación, que además de minimizar accidentes facilite un mantenimiento eficiente y seguro.
La implementación de estas medidas desde la fase de diseño también promueve una mayor eficiencia operativa y sostenibilidad a largo plazo. De hecho, varias certificaciones relacionadas con la sostenibilidad toman en cuenta aspectos críticos relacionados con el bienestar de las personas, no solo con la huella de carbono del edificio.
¿Cómo puede el diseño de ingenierías brindar mayor seguridad en un edificio?
Evaluar y mitigar los riesgos en cualquier entorno laboral requiere de integrar eficazmente los sistemas, herramientas y maquinarias que se van a utilizar dentro de la estructura arquitectónica, así como el uso de materiales de construcción modernos y la implementación de instalaciones electromecánicas que puedan resistir mejor a condiciones extremas y brindar respuestas óptimas en situaciones de emergencia.
Para ello, es necesario un profundo entendimiento de las condiciones laborales y los riesgos inherentes a las operaciones industriales. Esto implica conocer los aspectos de la manipulación y transporte de agentes biológicos y sustancias peligrosas, el almacenamiento de materiales potencialmente inflamables o susceptibles de provocar un incendio y su correcta clasificación, la prevención de la contaminación del aire debido a residuos, la exposición a radiaciones, la correcta gestión del ruido que excede los decibeles seguros para el ser humano, los riesgos de electrocución o de prensamiento en el uso de maquinaria, entre otros aspectos críticos a considerar. Esta comprensión integral es fundamental para el diseño e implementación eficaz de sistemas de seguridad industrial que salvaguarden la integridad física y la salud de los trabajadores, así como la protección de los activos y la adecuada operación de las instalaciones industriales.
También hay que considerar cómo todos los elementos de un edificio se van a comportar en caso de alguna situación adversa inesperada, por ejemplo un incendio, un terremoto o una inundación, ya que algunos podrían moverse de su sitio y provocar un aplastamiento, generar corriente eléctrica peligrosa o explotar.
La adecuación de máquinas e instalaciones permite a los ingenieros y arquitectos diseñar edificios que no solo faciliten la logística y mejoren la seguridad de los trabajadores, sino que también optimicen la producción y puedan ayudar al cliente a garantizar la calidad de sus productos. Esto incluye consideraciones sobre cómo las configuraciones espaciales pueden influir en la seguridad mediante la mejora del flujo de trabajo.
Normas técnicas de seguridad en el diseño arquitectónico industrial
Existen infinidad de normas técnicas de seguridad que desempeñan un papel crucial para que los ingenieros y arquitectos diseñen edificios seguros y que minimicen los riesgos. Cada país tiene sus propias normativas, pero todos tienen en común el hecho de que son requisitos obligatorios para que el edificio se considere en regla.
En México, las Normas Técnicas Complementarias del Reglamento de Construcciones son de suma importancia e incumplirlas puede llevar a costosas remodelaciones, clausuras e incluso a la pérdida de vidas. Adicionalmente, entre las normas más relevantes se encuentran la NOM-001-STPS-2008, que establece las condiciones de seguridad para edificios, locales, instalaciones y áreas de trabajo; la NOM-STPS-2010, que se enfoca en la prevención y protección contra incendios en entornos laborales; y la NOM-004-STPS-1999, que establece las condiciones y medidas de prevención de riesgos en la maquinaria y equipo utilizados en los centros de trabajo.
Asimismo, la NOM-022-STPS-2008 establece condiciones de seguridad respecto a la electricidad estática en entornos laborales, y la NOM-029-STPS-2011 detalla condiciones de seguridad para el correcto mantenimiento de instalaciones eléctricas. Por su parte, la NMX-SAST-001-IMNC-2008 establece sistemas de gestión para la prevención de riesgos laborales, proporcionando un marco integral para la gestión efectiva de la seguridad y salud en el trabajo.
Garantizar la seguridad industrial a través del diseño arquitectónico no es solo una cuestión de cumplir con la ley, sino una responsabilidad ética hacia los trabajadores y la sociedad. Además, facilita a los usuarios el cumplimiento de otras normas y protocolos operativos, como los del Sistema de Protección Civil mexicano o normas oficiales mexicanas de seguridad e higiene.
Page: diseño arquitectónico industrial que prioriza la seguridad
En Page, sabemos que la seguridad industrial es fundamental en cualquier edificio, especialmente si está destinado a procesos industriales, que suelen conllevar los riesgos más altos. Nuestra filosofía incorpora principios de seguridad desde el diseño en cada proyecto, garantizando que cada espacio no solo cumpla con los más altos estándares de estética y funcionalidad, sino que también se adhiera rigurosamente a todas las normas de seguridad.
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